Es el final, estoy rendida.
Salí a buscarte y terminé perdida.
Después de tantos momentos que creí perfectos,
hoy de mis ojos la venda cayó.
Al principio sentí el más profundo dolor.
El llanto más desgarrador se alojó dentro de mi alma.
Y absurdamente me sentí morir al dejarte partir.
Se encerró mi corazón y perdí las llaves.
Es duro saber que jamás me amaste,
que en mi mirada para ti sólo había ilusión,
y tu te aprovechaste de mi debilidad.
Tonta yo, sabiendo que era un juego
nunca tuve el valor de aceptar que en tus labios había traición.
Te puedes ir.
Retenerte me haría sentir como una vagabunda
mendigando tu amor.
Prefiero dejarte ir.
Yo también tomaré mi equipaje y voy a salir.
A estar sola, a renacer y olvidar lo que contigo viví.
Sufrí, me dejé caer ingenuamente a tus pies.
Pero ya no más. Hoy por fin desperté.
Noelia Rivera (Puerto Rico)
Pingback: Dejarte ir (Noelia Rivera Cotto) – Karma Lunática